Ichigo Ichie: vive cada vez como si fuese la última

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Jueves 11 de mayo 2023 y hoy voy a hablar de Ichigo Ichie y no se trata de un señor

japonés aunque lo parece. Es algo que tenía puesto en esta, tengo un programa en el que

me voy, ideas que me van viendo al cabeza la voy soltando ahí para que luego no se me

olviden, básicamente de los temas que quiero tratar. Y tenía hace mucho tiempo puesto Ichigo Ichie

y justo ayer Kiko, el mismo Kiko que me regaló la bicicleta que el otro día me robaron, un saludo

de nuevo Kiko, me dijo en Mastodon que estaría igual que hablar de meditación y bueno pues me dio

ese pujo que a veces me falta cuando muero algún tema de decir y cuando lo hago, cuando lo hago,

pues hoy es el día. Ichigo Ichie literalmente significa en japonés una vida un encuentro y es

una frase japonesa que describe un concepto cultural que normalmente se suele traducir como solo por

esta vez o nunca más o una oportunidad en la vida. Como que algo que pase hoy podemos suponer que

bueno igual no le damos la importancia que debería tener porque bueno se va a volver a repetir la

cena familiar en la que está todo el mundo y alguien se pone a sacar una foto y mira ya está

el pesado que hace la foto ahí otra vez diciendo vamos a hacer una foto bueno pues normalmente

esa gente en la cabeza tiene este concepto de que cualquier cosa puede ser la última vez y guardar

esos recuerdos aparte de vivirlos porque puede ser que eso algo tan tonto como eso no se repita

hay gente que no le gustan los cumpleaños y al final los cumpleaños pues a mí tiene el concepto

de "mira estamos otro año aquí que no es nada fácil y no es valadí y no es algo que tenga

por qué pasar por naturaleza". De ahí viene ese concepto de Ichigo Ichie y por ejemplo los ingleses

al presente le dicen present que es lo mismo que regalo y es donde entra en juego la meditación,

la meditación y el mindfulness sobre todo estas palabras así pueden provocar rechazo pero y me

conocéis, yo creo que ya me conocéis bastante esto de las magufadas y de historias así místicas,

de saludos al sol, pero en ese tono de venga y qué guay y demás, es a ver que eso va muy muy poco

conmigo, así que te animo que si eres exéptico de la meditación, que te quedes todavía por aquí,

por lo menos hasta el final, porque no voy a hablar de misticismo ni cosas así, voy a hablar de algo

bastante más terrenal. Se dice que la depresión es un exceso de pasado y que la ansiedad es un

exceso de futuro y que lo que hay que hacer es vivir el presente porque el presente es estar en paz

y es un regalo aunque también puede ser que el exceso de presente no nos provoque estrés, pero bueno

quedemos con ese concepto más de estar en paz y sobre todo sobre todo de vivir el presente en

lugar de estar en ese exceso de pasado o en ese exceso de futuro. Obviamente es mucho más fácil

decir lo que hacerlo como tantas cosas en esta vida pero el concepto viene de aquí de aquí es donde

sale o surge la meditación. ¿Cuántas veces nos pasa al cabo del día que estamos en un momento

viviendo algo o haciendo algo y la cabeza está en otro sitio? ¿O está en el pasado o está en el

futuro? ¿O preocupándose de lo que va a venir? ¿Cómo va a venir? ¿O preocupándose de lo que fue?

Obviamente tiene que existir una conciencia del presente y a donde nos va a llegar y tenemos

una responsabilidad en la vida, que si no cumplimos van a hacer que esa ansiedad, ese

exceso de futuro pues nos llegue antes. Y aquí es donde la meditación puede ayudarnos,

puede ayudarte a estar en conexión con el presente, vivir ese momento o simplemente

dejar de estar divagando mentalmente en lo que pasó o en lo que pasará. La meditación

nos ayuda a eso, nos ayuda a reducir esa ansiedad, aunque yo lo tengo que decir, cuando tengo

momentos muy muy muy altos de ansiedad me cuesta y no consigo hacerlo esto es como todo en esta vida

cuando más te pueda hacer falta hacer una cosa cuando más te puede ayudar pues o bajas un poquito

el punto de intentar hacerlo simplemente es que te cuesta más y lo vas dejando pero bueno supongamos

que podemos hacerlo pues esto es algo que nos puede ayudar a estar en ese momento y a estar mejores y

la meditación es algo tan simple como eso, es buscar algún objeto de meditación, un objeto

el que pensemos, el objeto puede ser la respiración, que es lo que más te sonará haber visto,

el objeto de ese foco puede ser, pues, que va a ser el metro por la mañana a trabajar,

sentir las vibraciones del propio vagón en los pies o si vas andando, el objeto de meditación

puede ser el ruido de los coches o de los pájaros, estar consciente de lo que está alrededor o

meditar puede ser ser consciente de lo que estás comiendo, el lugar de estar con la cabeza en otro

sitio o mientras que ves la tele y te extraes del momento, que eso ya es otro otro rollo, encontrar

ese momento para evadirte con series películas y cualquier otra historia que ya he comentado alguna

vez. La meditación puede consistir también en darse cuenta de esas pisadas que estás dando de

lo que sientes en los pies o en los zapatos cada vez que vas andando. El caso es que la meditación

te intenta traer al presente y digo "te intenta" porque el objeto principal de la meditación no

es estar en el presente y no intentarlo y cuando te das cuenta que te has ido a tardar lo menos

posible, no hay nada mal en este aspecto si tardas más o menos darte cuenta de que te has ido y que

vos al vuestro a pensar en otras cosas y volver al presente. Pongamos que tienes un pensamiento en

la cabeza recurrente de "vos he dicho una cosa a un compañero, compañera, cómo se lo habrá tomado,

estará en su casa pensando en lo que he dicho. Lo más normal es que lo único que está pensando en eso y

está ganando ansiedad dándole vueltas a eso una vez y otra y otra en bucle seas tú mismo. ¿Cómo

podríamos salir de este bucle? Pensando en, por ejemplo, la respiración. Uno se centra en la

respiración y como va entrando el aire por la nariz, pasa por la garganta, vamos intentando hacer

ese movimiento, ese movimiento mental de cómo el aire va bajando hasta que llenamos los pulmones,

o la barriga. Esto lo vamos a hacer y de repente nos vamos a dar cuenta de que estamos otra vez

pensando en esa otra cosa. Puede ser el primer pensamiento, puede ser que tengo que comprar macarrones

que no quedan. En ese momento que estás pensando en los macarrones y vuelves a centrarte en la

respiración, ese es el momento en el que estás haciendo la meditación. Es algo que te recomiendo

hacer, no es algo por lo que haya que pagar, aunque yo tengo aplicaciones de pago, que pago gustosamente,

sí que es verdad que merece la pena pasar por alguna aplicación de estas aunque sea unas semanas,

por ejemplo hay una que se llama Tempersen, el nombre anterior era Tempersen Happier, que a mí me

ayudó a dejar de ser escéptico en esto porque hay un… bueno directamente hay muchísimos cursos

dentro de esa aplicación pero hay uno que es meditación para escépticos y va a empezar a

empieza por algo así antes de meterte en la meditación porque puede ser que al principio pienses que

no sirve para nada y lo dejes. Entonces aunque no haya que pagar por algo, pues ese puntito de

profesionalidad al principio de buscar algún vídeo o algo que te haga empezar y luego ya pues uno

puede volar solo. Como digo, el objeto de meditación puede ser cualquier cosa que te haga vivir en el

presente en lugar de dejar que la mente fluya libremente que luego pues tiene sus peligros y es

nuestro peor enemigo, muchísimos, muchísimos casos. Para meditar no hay que estar en la posición de la

flor del oto, no hay que estar como sentado en un cogín de meditación, no hay que estar acostado,

no hay que estar con los ojos abiertos, no hay que estar con los ojos cerrados y que algunas de

estas cosas pueden ayudar en los primeros pasos, pero como he dicho al final el objeto de meditación

puede ser algo que vayas haciendo en el propio vagón cuando vas al trabajo o lo que sea. Luego

hay relojes como puede ser la Apple Watch que tiene aplicación de respirar, de meditación y que puede

parecer una chorrada pero esto ayuda, sobre todo cuando ya tienes ese hábito y sabes que aunque te

esté costando más esa época de hacerlo no es algo que ayuda pues te puedes poner de vez en

cuando un minuto y centrarse en ese momento en ti en lugar de lo que está pasando por tu cabeza.

Lo recomiendo muchos, sin misticismos, no creo que por hacer meditación vayas a ser ni más

creativo o más creativa ni vayas a ser como si estuvieras tomando LSD y seas Walter Bishop,

que eres capaz de abrir portales interdemesionales o como Steve Jobs y que de repente vayas a

inventar la siguiente nueva tecnología. No, como decía el principio, no estoy hablando de

misticismos, pero sí que como salud mental, como estar ese 10% más feliz y más lejos de esos

pensamientos recurrentes que nuestro cerebro, pues es bastante puñetero. Muchas veces te recomiendo.

La meditación es una herramienta, como puede haber muchas, es la herramienta que me ha ayudado a

vivir el presente y no estar preocupado, en muchos casos no puedo evitarlo, preocupado demasiado por

el futuro o por el pasado y lo que es casi más importante muchas veces es perderte momentos,

perder de situaciones que no se van a volver a repetir nunca y que una vez que te las has

perdido pues ya no hay vuelta atrás. Y nada más por hoy, que pases muy buen jueves, un saludo y hasta mañana.

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